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    El Agave attenuata, es una suculenta que genera unos troncos suaves y curvados, a menudo ramificados. Las hojas viejas, se arrugan y caen.

    Cuando se desarrollan en el suelo, jardines, llegan a crecer sobre 1 metro de altura o más y con muchas rosetas de hojas. La attenuata carece de espinas.

    Tallo y hojas.

    Los tallos, son liso y verdes grisáceos, curvados y a frecuentemente ramificados. Crecen hasta 1 metro de altura, dejando caer las hojas viejas.

    Las hojas son anchas, suaves, flexibles y quizá algo traslúcidas. Suelen crecer unos 50 a 70 cm de largo y unos 12 a 16 de ancho. Son de color verde o verde amarillento claro o verde-gris-azulado.

    No presentan espinas terminales ni dientes. Surgen del dentro y se van arqueando elegantemente hacia atrás.

    El Agave attenuata, es el único Agave que crea un tronco, de hasta un metro de altura y medio metro de ancho.


    Flores.

    Las flores del Agave attenuata, son de color amarillo verdoso pálido y se presentan en un racimo denso de 1,5 a 3,5 cm de largo.


    A lo largo de los meses, el tallo vertical de la flor se desarrolla inicialmente como un conjunto de cogollos verdes, que van abriendo de abajo hacia arriba con flores de color amarillo verdoso, luego se reflejan hacia el suelo antes de arquearse otra vez hacia arriba.

    Todo ese desarrollo, es que le da el nombre de cuello de cisne, de hasta varios metros de longitud.

    Las flores generan vainas de semillas y de las axilas de las flores, brotarán muchas plántulas, mientras que la roseta madre muere. No da bayas y no es tóxica.

    Tras la floración, la base del tronco dará multitud de hijuelos que facilitarán el proceso de multiplicación. Bastará con trasplantarlos.

    A diferencia de otros Agaves, la atenuata NO muere después de la floración. Puede vivir de 30 a 100 años, es muy longeva.


    Florece en la primavera y puede tardar hasta 10 años, en hacerlo.


    Como cultivar el Agave attenuata

    La attenuata es una agavácea que funciona muy bien con otras suculentas o resto de plantas tropicales. Puede crecer en la naturaleza o en un contenedor o maceta apropiado.


    Es sensible a las heladas, no tolera temperaturas inferiores a los -2ºC.


    Tolera bien el sol directo, pero mejor mantenerlo a sombra parcial.


    Sustrato y abono.

    Es una planta austera en cuanto al sustrato. Puede vivir en suelos pobres, pero lo más indicado es un sustrato rico y bien drenado. Una mezcla puede ser 2 partes de turba, una parte de arcilla y una parte de piedra pómez o gravilla media.


    Mejor evitar el material orgánico y más parte mineral, calizo y arenoso.


    Riego

    La attenuata es extremadamente tolerante a la sequía, pero mejorará con la humedad y crecerá más rápidamente si se mantiene bien regada y nutrida.


    Durante los meses de invierno, solo se debe regar lo suficiente como para evitar que las hojas se encojan. Las plantas cultivadas al aire libre son más tolerantes a la sequía y pueden tomar algo de calor y pleno sol.


    Tolera los ambientes cercanos al mar.


    No necesita poda ninguna, pero si se retiran hojas, estas segregarán una savia altamente irritante para los ojos y la piel. Actuar con guantes y evitar a los niños hacerlo.


    Multiplicación.

    La propagación será por semillas o mediante la eliminación de retoños, producidos en la base de plantas más viejas o utilizando los bulbillos pequeños producidos en toda la longitud del tallo de la flor.


    Agave attenuata - ejemplar de colección gigante - maceta 110 litros

    El Agave attenuata, es una suculenta que genera unos troncos suaves y curvados, a menudo ramificados. Las hojas viejas, se arrugan y caen.

    Cuando se desarrollan en el suelo, jardines, llegan a crecer sobre 1 metro de altura o más y con muchas rosetas de hojas. La attenuata carece de espinas.

    Tallo y hojas.

    Los tallos, son liso y verdes grisáceos, curvados y a frecuentemente ramificados. Crecen hasta 1 metro de altura, dejando caer las hojas viejas.

    Las hojas son anchas, suaves, flexibles y quizá algo traslúcidas. Suelen crecer unos 50 a 70 cm de largo y unos 12 a 16 de ancho. Son de color verde o verde amarillento claro o verde-gris-azulado.

    No presentan espinas terminales ni dientes. Surgen del dentro y se van arqueando elegantemente hacia atrás.

    El Agave attenuata, es el único Agave que crea un tronco, de hasta un metro de altura y medio metro de ancho.


    Flores.

    Las flores del Agave attenuata, son de color amarillo verdoso pálido y se presentan en un racimo denso de 1,5 a 3,5 cm de largo.


    A lo largo de los meses, el tallo vertical de la flor se desarrolla inicialmente como un conjunto de cogollos verdes, que van abriendo de abajo hacia arriba con flores de color amarillo verdoso, luego se reflejan hacia el suelo antes de arquearse otra vez hacia arriba.

    Todo ese desarrollo, es que le da el nombre de cuello de cisne, de hasta varios metros de longitud.

    Las flores generan vainas de semillas y de las axilas de las flores, brotarán muchas plántulas, mientras que la roseta madre muere. No da bayas y no es tóxica.

    Tras la floración, la base del tronco dará multitud de hijuelos que facilitarán el proceso de multiplicación. Bastará con trasplantarlos.

    A diferencia de otros Agaves, la atenuata NO muere después de la floración. Puede vivir de 30 a 100 años, es muy longeva.


    Florece en la primavera y puede tardar hasta 10 años, en hacerlo.


    Como cultivar el Agave attenuata

    La attenuata es una agavácea que funciona muy bien con otras suculentas o resto de plantas tropicales. Puede crecer en la naturaleza o en un contenedor o maceta apropiado.


    Es sensible a las heladas, no tolera temperaturas inferiores a los -2ºC.


    Tolera bien el sol directo, pero mejor mantenerlo a sombra parcial.


    Sustrato y abono.

    Es una planta austera en cuanto al sustrato. Puede vivir en suelos pobres, pero lo más indicado es un sustrato rico y bien drenado. Una mezcla puede ser 2 partes de turba, una parte de arcilla y una parte de piedra pómez o gravilla media.


    Mejor evitar el material orgánico y más parte mineral, calizo y arenoso.


    Riego

    La attenuata es extremadamente tolerante a la sequía, pero mejorará con la humedad y crecerá más rápidamente si se mantiene bien regada y nutrida.


    Durante los meses de invierno, solo se debe regar lo suficiente como para evitar que las hojas se encojan. Las plantas cultivadas al aire libre son más tolerantes a la sequía y pueden tomar algo de calor y pleno sol.


    Tolera los ambientes cercanos al mar.


    No necesita poda ninguna, pero si se retiran hojas, estas segregarán una savia altamente irritante para los ojos y la piel. Actuar con guantes y evitar a los niños hacerlo.


    Multiplicación.

    La propagación será por semillas o mediante la eliminación de retoños, producidos en la base de plantas más viejas o utilizando los bulbillos pequeños producidos en toda la longitud del tallo de la flor.


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